El término «Marketing Digital» no es de reciente creación, contrariamente a lo que muchos creen. Empezó a usarse en la década de los 90, aunque de un modo diferente al que ahora conocemos. Con la entrada del nuevo siglo y la rápida evolución de las nuevas tecnología y los medios digitales, se fue volviendo cada vez más sofisticado. A partir del año 2010, el marketing digital, adquiere mayor protagonismo y sufre un cambio radical, sobre todo, en lo referente a su uso y funcionalidad. El incremento en el número de dispositivos, que permiten acceder a las plataformas digitales, ha creado nuevas oportunidades para la publicidad. Ésto, ligado a la evolución que está sufriendo el marketing, se traduce en un crecimiento exponencial en la publicidad digital.
¿Qué es el marketing digital y para qué sirve?
El marketing digital, marketing online o marketing 2.0, es una herramienta más del marketing. Abarca todas las acciones de comunicación pública realizadas a través de canales digitales, es decir, de Internet. Este instrumento permite publicar y promocionar productos o servicios a través de la plataforma digital.
Este instrumento da mayor visibilidad a la marca. Además, consigue un volumen mayor de clientes, y por lo tanto un volumen mayor de ingresos. El marketing digital tiene cuatro objetivos básicos: captación del usuario, conseguir una interacción, convertir el usuario en cliente y por último fidelizarlo. Es por esto que se dice que el funcionamiento de esta herramienta es igual a un embudo.
Características del marketing digital:
- Segmentación del mercado.
- Comunicaciones multicanal, con técnicas de promoción conjuntas de push y pull.
- Publicidad «ad hoc», según comportamiento del usuario en la red.
- Llega a muchos lugares con una inversión más pequeña.
- Con uso herramientas correctas mayor efectividad.
Ventajas de usar marketing digital:
- Permite el alcance de un mayor número de consumidores.
- Por lo que, se capta un mayor número de clientes potenciales.
- Ayuda a fidelizar a los clientes actuales de la empresa.
- Todo lo anterior supone un mayor número de ventas, y por lo tanto de ingresos, con una inversión mínima.
- Mejora la reputación de la empresa, potenciando la identidad de marca y su reconocimiento.